Como prevenir la filariosis en los perros

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Filariosis

8 medidas de precaución contra la filariosis


Ya es bastante molesto que nos pique un mosquito y pasar el resto del día rascándonos. Sin embargo, para los perros y los gatos, los mosquitos son algo más que una molestia, ya que pueden trasmitir unos parásitos que se alojan en el corazón. A menos que el animal tome medicación preventiva, un mosquito infestado puede depositar en el torrente sanguíneo del perro las larvas de este peligroso parásito.

Como prevenir la filariosis en los perrosComo prevenir la filariosis en los perros


Tras alojarse en el corazón, estos parásitos causan tos, respiración agitada, pérdida de peso y, en ocasiones, la muerte. Aunque la mayoría de los casos de filariosis se presentan en perros, los gatos también pueden infestarse.
Puesto que no hay ningún medio eficaz para evitar las picaduras de mosquitos, es fundamental tomar medidas preventivas.

  • Impídale el paso. Los veterinarios recomiendan que todos los perros y gatos de las zonas de riesgo tomen medicación preventiva. De ese modo, si a su animal de compañía le pica un mosquito, el fármaco presente en su torrente sanguíneo destruirá los parásitos antes de que éstos maduren y causen problemas.

La medicación contra la filariosis se presenta en dos modalidades: una píldora de uso diario y otra de uso mensual. Si vive en una zona donde el invierno es frío –y, en consecuencia, no hay mosquitos durante esa estación-, es probable que el veterinario prescriba medicación sólo durante la temporada de parásitos. Sin embargo, muchos veterinarios prefieren mantener el tratamiento durante todo el año.

  • No se fíe. Aunque su perro nunca salga de casa, siempre es posible que un mosquito se cuele en el interior. Tanto los animales que viven al aire libre como los que viven en el interior de una casa deben tomar la medicación.

  • Sométalo a un análisis. Administrar medicación preventiva a un animal ya infestado podría ser peligroso, por lo cual los veterinarios siempre realizan un análisis de sangre antes de prescribir estas píldoras. Si comprueba que el animal no está infestado, podrá comenzar el tratamiento preventivo.

  • Revise su historial. Los antiguos métodos de análisis para detectar la filariosis no eran del todo fiables. Por lo tanto, pida al veterinario que examine el historial clínico del animal para determinar si es conveniente hacer un análisis nuevo.

  • No intercambie las píldoras. La medicación para la filariosis se presenta en distintas intensidades. La dosis adecuada para un animal puede ser ineficaz para otro. Asimismo, una dosis inocua para un perro podría ser peligrosa para un gato. En consecuencia, no intercambie ni mezcle los fármacos. Someta a cada animal a un análisis y luego deles las píldoras prescritas para cada uno.

  • Invierta en tela metálica. Aunque seguramente no podrá impedir que los mosquitos se cuelen en su casa, cubrir las aberturas de ventanas y puertas con mamparas de tela metálica puede ayudarle a reducir el número de intrusos. Repare o cambie las mamparas de tela metálica en cuanto se rompan.

  • Invite a comer a unos amigos. Si instala un comedero para vencejos en el jardín, atraerá a estos voraces pájaros, capaces de comer millares de mosquitos al día. Esto ayudará a mantener controlado el número de mosquitos, y también las infecciones. También es conveniente eliminar los pozos o charcos de agua estancada, donde proliferan los mosquitos.

  • Evite las excursiones arriesgadas. La filariosis es mucho menos frecuente en los gatos que en los perros, razón por la cual no se suele prescribir medicación preventiva a los felinos.

Sin embargo, los gatos también pueden infestarse. Por lo tanto, mantenga a su gato dentro de casa, sobre todo a las horas en que hay más mosquitos, como al atardecer y por la noche.

CUÁNDO CONSULTAR AL VETERINARIO

Una vez que el animal ha contraído la filariosis, el tratamiento es difícil. Los fármacos empleados para eliminar los parásitos contienen arsénico, una sustancia que puede resultar más peligrosa que la propia enfermedad.

Sin embargo, cuando la filariosis se detecta en los primeros estadios, el tratamiento es mucho más sencillo que cuando está avanzada. Por eso es importante acudir al veterinario en cuanto observe los primeros síntomas, como tos, respiración agitada o fatiga.

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